En el sector de la fabricación de carrocerías cisterna, las labores de montaje, mantenimiento y limpieza suelen realizarse a alturas considerables, lo que convierte la seguridad en un aspecto crítico del trabajo diario. Para garantizar la integridad de los trabajadores, es fundamental la correcta instalación y revisión periódica de sistemas de protección contra caídas, como las líneas de vida y los puntos de anclaje.
Importancia de los sistemas de seguridad en altura
Los fabricantes de carrocerías cisterna operan con estructuras metálicas de gran volumen que requieren intervención frecuente desde su parte superior. Estos entornos presentan un alto riesgo de caídas, por lo que la normativa vigente exige la implementación de sistemas anticaídas certificados. Las líneas de vida y puntos de anclaje son elementos esenciales para garantizar la seguridad del personal durante trabajos en altura, como la instalación de accesorios, inspecciones o limpieza de la cisterna.
Instalación adecuada según normativa
La instalación de líneas de vida debe realizarse según las normativas europeas EN 795 y EN 353-1, o las normas nacionales equivalentes, asegurando que cada componente cumpla con los requisitos técnicos. En el caso de las carrocerías cisterna, se debe considerar la estructura del vehículo y las condiciones de uso. Es común utilizar líneas de vida horizontales fijadas sobre la cisterna o estructuras portátiles, siempre ancladas a puntos resistentes certificados.
Los puntos de anclaje, por su parte, deben instalarse en ubicaciones estratégicas que permitan libertad de movimiento al trabajador sin comprometer la seguridad.
Revisión y mantenimiento periódico
Además de una instalación correcta, la revisión regular de los sistemas es vital para asegurar su eficacia a lo largo del tiempo. La normativa recomienda una inspección al menos una vez al año, o después de cualquier incidente que pueda comprometer la integridad del sistema. Estas inspecciones deben estar documentadas.
El mantenimiento incluye la verificación de tensiones, corrosión, fijaciones, desgaste de cables o cintas, y pruebas de carga cuando sea necesario. Un fallo en estos elementos puede significar la diferencia entre la vida y la muerte en caso de una caída.